El hombre y su hija de poco menos de 2 años yacen ahogados boca abajo en la orilla del Río Bravo. La camisa negra del hombre está subida a la altura de su pecho y la menor está metida dentro de la prenda. El brazo de la niña está estirado por detrás del cuello de su padre, lo que indica que se aferró a él hasta el último minuto. Es la imagen que recorre el mundo mostrando la tragedia que viven los migrantes de todos lados en busca del sueño americano.

La desgarradora escena fue capturada el lunes en una fotografía por la periodista Julia Le Duc y publicada por el periódico mexicano La Jornada. Al respecto la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi le dijo a The Associated Press que espera que la imagen sacuda la conciencia del Gobierno de Donald Trump, ya que está ignorando “sus obligaciones con la humanidad”. Por ello, tiene confianza en que la foto muestre que “se puede hacer algo mejor”.

Tania estaba allí. Vio frente a ella la tragedia, su propia tragedia: a su bebé de 23 meses hundirse en el Río Bravo; a su esposo, Óscar Alberto Martínez Ramírez, de 25 años, desaparecer en los remolinos de agua.

Angie Valeria Martínez Ávalos (la bebe de 23 meses) y Óscar, habían cruzado todo tipo de peligros. Habían escapado de criminales y de autoridades mexicanas, antes de llegar a un rio que cobraría la vida de ella y su padre.

Martínez puso a la niña en la orilla estadounidense del río y comenzó a regresar por su esposa, Tania Vanessa Ávalos, pero al ver cómo se alejaba su padre, la nena se lanzó al agua. Martínez se dio cuenta del hecho cuando ya se encontraba en el medio del rio, regresó y alcanzó a tomar a Valeria, pero justo en ese momento se formó una corriente fuerte, en el rio que momentos antes se tornaba tranquilo, y ambos fueron arrastrados por la corriente.

El sueño americano

Iban de El Salvador. Querían empleo, un lugar dónde vivir. El mítico “sueño americano”.

“Yo le dije que dejara de perseguir el ‘sueño americano’, que no era fácil cruzar la frontera por el río. Óscar se me murió. Óscar y la niña se me murieron. Yo les rogué que no se fueran, pero él quería juntar dinero para hacer su casa. Esperaban estar unos años y ahorrar dinero para la casa”, dijo Rosa María Ramírez, madre de Óscar, a ElSalvador.com.

Contó también que Oscar trabajaba en una pizzería y que con lo poco que le pagaban no alcanzaba para hacer la construcción de su casa por lo que con su familia decidieron migrar al norte donde tienen parientes en el estado de Texas ciudad de Dallas, quienes le habrían prometido trabajo.

Antes de que todo sucediera, Óscar Alberto Martínez Ramírez, fue frustrado porque su familia, originaria de El Salvador, no pudo presentarse ante las autoridades estadounidenses y solicitar asilo, tras no recibir respuesta y al saber que miles de personas esperaban lo mismo decidió cruzar la frontera por el rio Bravo acompañado de su esposa y su bebe, con la esperanza de poder hallar a sus familiares que viven en Dallas de EEUU.

Los detalles del incidente fueron confirmados el martes por un funcionario del Gobierno del estado de Tamaulipas, quien habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado para hablar del tema públicamente, y por la madre de Martínez en El Salvador, Rosa Ramírez, quien habló con su nuera por teléfono después del hecho.

La búsqueda de Martínez y su hija se suspendió el domingo por falta de luz, y sus cadáveres fueron descubiertos al día siguiente cerca de Matamoros, México, limítrofe con Brownsville, Texas, a varios metros de donde intentaron cruzar y a sólo 1 kilómetro (media milla) del puente internacional.

“Cuando la niña se le zafó es cuando él trató de alcanzarla, pero cuando él trato de agarrar a la niña fue cuando se metió más adentro para salvarla… fue cuando ya no pudo salir”, dijo Ramírez a la AP. “Él se la metió en su camisa y me imagino que él dijo: ‘Hasta aquí llegué’, y decidió irse con ella”.

Ramírez dijo que su hijo y su familia salieron de El Salvador el 3 de abril y pasaron unos dos meses en un albergue en Tapachula, cerca de la frontera de México con Guatemala.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador dijo que trabajaba para asistir a la familia, incluida Ávalos, quien estaba en un albergue para migrantes en la frontera después de los ahogamientos. Se prevé que los cuerpos sean llevados el jueves por avión a El Salvador.

“Me llamó mucho la atención el brazo de la niña sobre su papá”, dijo Le Duc al describir la escena que vio cuando llegó al lugar. “Este caso en particular me pone, nos puso sensibles, por las circunstancias, por el padre abrazado de su hija en ese último aliento los dos ahogados, cómo se fueron juntos a la muerte”.